Crédito de la foto: Desky
En Kloeckner, nos esforzamos constantemente por ser más eficientes cada día. Piense que pasaría menos tiempo haciendo las cosas que no le gustan y más en las que le aportan satisfacción, felicidad y productividad. Algunas personas son realmente expertas en eficiencia. Gestionan cada momento manejable para tener más tiempo para hacer las cosas que aportan valor. He aquí cuatro técnicas para mejorar nuestra eficiencia.
1. Trabaje menos horas extraordinarias y aumente su productividad
¿Se ha preguntado alguna vez de dónde viene la semana laboral de 40 horas? En 1926, Henry Ford, industrial estadounidense y fundador de Ford Motor Company, realizó experimentos con resultados interesantes: al reducir la jornada laboral de 10 a 8 horas y acortar la semana laboral de 6 a 5 días, la productividad mejora drásticamente. Cuanto más trabajes, menos eficiente y productivo serás a corto y largo plazo. "Scheduled Overtime Effect on Construction Projects", un informe publicado por The Business Roundtable en 1980 afirma.
"Cuando un horario de trabajo de 60 o más horas semanales se prolonga más de unos dos meses, el efecto acumulativo de la disminución de la productividad causará un retraso en la fecha de finalización superior al que podría haberse realizado con el mismo tamaño de cuadrilla en una semana de 40 horas."
2. No digas "sí" con demasiada frecuencia
El 20% del esfuerzo produce el 80% de los resultados, según el Principio de Pareto; sin embargo, el 80% del esfuerzo lo consume el 20% de los resultados. En lugar de trabajar más, deberíamos concentrarnos en los intentos que generan el 80% de los resultados. Tendremos más tiempo para concentrarnos en las funciones clave. Deberíamos dejar de decir "sí" a encargos que generan pocos o casi ningún resultado- Eso es todo.
En un estudio de 2012 publicado en el Journal of Consumer Research, los investigadores dividieron a 120 estudiantes en 2 grupos. A un grupo se le entrenó para usar "no puedo", mientras que al otro se le entrenó para usar "no lo hago". Los resultados fueron interesantes:
Los estudiantes que se dijeron a sí mismos "no puedo comer X" optaron por comer la chocolatina el 61% de las veces. En cambio, los estudiantes que se dijeron a sí mismos "no como X" eligieron comer las chocolatinas sólo el 36% de las veces. Este simple cambio de terminología mejoró significativamente las probabilidades de que cada persona eligiera un alimento más saludable.
La próxima vez que necesites evitar decir "sí", di "no puedo".
3. Deja de hacer todo tú mismo y empieza a dejar que la gente te ayude
Si sigues intentando hacerlo todo tú solo, perderás la cordura y/o te quemarás. Lo que ocurra primero. Si otras personas te ofrecen ayuda, acéptala. No estás siendo egoísta, perezoso, descuidado o desconsiderado.
Algunos de nosotros hemos crecido con la mentalidad de "arréglatelas tú solo", pero a veces es bueno que otra persona haga un poco el trabajo pesado. A pesar de lo que la sociedad nos haya enseñado, no tenemos por qué hacerlo todo nosotros mismos. No podemos ser buenos en todo, pero sin duda todos somos buenos en algo.
El mero hecho de tener amigos cerca puede empujarte hacia la productividad. "Existe un concepto en el tratamiento del TDAH llamado 'doble del cuerpo'", dice el doctor David Nowell, neuropsicólogo clínico de Worcester, Massachusetts. "Las personas distraídas consiguen hacer más cosas cuando hay alguien más allí, aunque no les esté entrenando o ayudando". Si te enfrentas a una tarea aburrida o difícil, como limpiar los armarios o reunir los recibos para la declaración de la renta, pide a un amigo que sea tu doble.
4. Deja de ser perfeccionista
"Hemos descubierto que el perfeccionismo pone la zancadilla a los profesores en el camino hacia la productividad investigadora. Cuanto más perfeccionista es el profesor, menos productivo es", explica a la revista University Affairs el Dr. Simon Sherry, catedrático de Psicología de la Universidad Dalhousie que llevó a cabo una investigación sobre perfeccionismo y productividad. El Dr. Sherry descubrió una sólida correlación entre el aumento del perfeccionismo y la disminución de la productividad.
He aquí algunos problemas asociados a ser perfeccionista:
Las placas base de acero son elementos fundamentales empleados en diversos...
La fabricación de metales es un proceso crítico que transforma el metal en bruto...
La industria solar ha experimentado una importante transformación al incorporar...
X
El sitio web de Kloeckner Metals utiliza tecnologías modernas. Lamentablemente, su navegador no es compatible con dichas tecnologías.
Descargue la última versión de uno de estos navegadores para disfrutar del sitio: